Son dispositivos de detección adaptados para proteger áreas abiertas con cielorrasos altos, es decir, áreas en donde resulta difícil realizar la instalación y el mantenimiento de otros métodos de detección de humo.
La Barrera infrarroja es un detector de humo convencional, por haz, apto para la protección de áreas abiertas con cielorrasos altos, áreas en donde resulta difícil realizar la instalación y las tareas de mantenimiento de otros métodos de detección de humo.
Pueden componerse de un emisor y un receptor o reemplazar este último por espejo. Una de las ventajas de éste (de unidad transmisora/ receptora) es que es mucho más fácil de instalar que los detectores por haz proyectado con unidad transmisora y unidad receptora. La alineación se logra rápidamente a través de una mira óptica y un potente medidor de señal.